Si la renegociación para la actualización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no alcanza los resultados esperados, las áreas que se verían más afectadas serían la de logística y la de cadena de suministro, reveló una encuesta de KPMG.
La firma de consultoría dio a conocer en su edición 2018 de ‘Perspectivas de la Alta Dirección en México’, que el primer lugar de impacto sería la cadena de suministro, seguida de los temas regulatorios, la logística y la distribución, los precios de transferencia y, finalmente, los reportes fiscales.
La incertidumbre sobre el retiro de Estados Unidos se ha intensificado ante la posibilidad de que, por considerarse un país en desarrollo, las tasas arancelarias que podría manejar con Estados Unidos y Canadá serían mayores que las que dichos países podrían imponer a México. A pesar de esto, un 54% de las empresas cree que su rentabilidad se mantendrá, un 11% observa incluso que se incrementará, mientras que un 17% supone una disminución de la rentabilidad y un 18% no observa cambios.
Ante este escenario, KPMG planteó que “la planeación de escenarios cobra especial importancia para identificar posibles impactos en la operación de las compañías, así como alternativas para afrontar las situaciones que podrían presentarse, incluyendo la evaluación de clientes y proveedores de países distintos a los actuales”.
Después de la ronda 5.5 del TLCAN, llevada a cabo en diciembre de 2017, César Buenrostro, Socio de Comercio Internacional y Aduanas de KPMG, precisó que, ante la voluntad de EE.UU. de seguir negociando después de las elecciones presidenciales en México y las elecciones intermedias de EE.UU., es posible tomar algunas acciones para enfrentar la incertidumbre sobre la meta final:
- Revisar que los modelos de negocios sigan teniendo sentido en vista de los cambios acordados para el TLCAN
- Planear las comunicaciones del TLCAN, incluyendo el compromiso con los grupos de interés
- Considerar si las propuestas a clientes y de marca funcionan con una retórica de “Hecho en” (y posiblemente con los respectivos cambios de política)
- Revisar los procesos TLCAN actuales, declaraciones y certificados de origen para ayudar a asegurar el cumplimiento total, dado que hay un mayor escrutinio y verificaciones por parte de las autoridades
- Evaluar el efecto en el inventario, la huella de fabricación, contratos, propiedad intelectual o sistemas y procesos
- Cuantificar el efecto del costo por unidad de los cambios a las normas laborales y ambientales
- Considerar si se necesita implementar un nuevo plan de logística
De acuerdo con Buenrostro, “cualquier negocio con comercio transfronterizo necesitará revisar su cadena de suministro y verificar el efecto que sobre él tendrá la reforma, considerando siempre que esté en línea con la planeación de escenarios sobre el TLCAN.”
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