Llevar a cabo un buen cumplimiento aduanero debe ser el objetivo primordial para toda organización en cualquier industria, y el primer paso para ahorrar tiempo, pero sobre todo costos en las operaciones, es realizar correctamente la clasificación arancelaria de la mercancía.
Pero… ¿qué es exactamente?
Cumplir con la clasificación arancelaria significa conocer la codificación exacta que determina los requisitos aduaneros, mismos que tu mercancía necesita cumplir para que formen parte de cualquier operación de comercio exterior.
👉🏻 Con ese código (que puede ser de 6 a 8 dígitos) se pueden realizar las transacciones a cualquier parte del mundo.
Y en términos generales, es el orden máximo de las cosas, pues es una codificación basada en la Clasificación del Sistema Armonizado de Designación de Mercancías: un sistema creado por la Organización Mundial de Aduanas (OMA) y que todos los puntos de entrada y salida –en el mundo– cumplen.
Todo agente aduanal debe conocer su impacto
Tu agente aduanal debe ser un especialista en el tema:
- Debe conocer las regulaciones. Saber, por ejemplo, que la OMA exige el cumplimiento de 21 secciones, 97 capítulos y 6 reglas generales, además de que en México se debe cumplir con la TIGIE y sus 22 secciones, 98 capítulos, 6 reglas generales y otras 10 complementarias.
<<Conoce las diferencias entre la LIGIE y TIGIE>>
Por otro lado, también tiene que ser un especialista de consultoría en comercio exterior, es decir, un completo conocedor de la merceología (ciencia que estudia el origen de las mercancías), pues aquello le ayudará a ofrecerte un mejor servicio y hacer:
- Que tus operaciones o tu mercancía sean correctamente registradas en su ingreso o salida en cualquier parte del mundo.
- Que puedas crear estadísticas confiables entorno a tus operaciones.
- Que puedas pagar el impuesto correcto de exportación, así como asegurar el ingreso de las mercancías de acuerdo con las RRNA correspondientes y así, evitar cualquier sanción.
Otro punto muy importante, y que tiene un gran impacto en las operaciones y la clasificación de mercancía (si tu agente aduanal conoce el proceso y la forma correcta de llevarlo a cabo) es la posibilidad de realizar consultas oficiales ante las autoridades aduaneras. Éstas se hacen para determinar la fracción arancelaria que le corresponde a cualquier producto.
Por ejemplo, se pueden realizar consultas cuando se considere que la mercancía puede clasificarse en más de una fracción o cuando se desconozca por completo su clasificación.
👉🏻 Hacer este tipo de acercamiento con las autoridades puede ahorrarte muchos esfuerzos, ya que evitarás gastos innecesarios en abogados que, en ocasiones, pelean defender la fracción a través de peritos y pruebas de laboratorio.
En el caso de las RRNA
Las Restricciones y Regulaciones No Arancelarias (RRNA) pueden ser un gran reto para el sistema de la OMA, es decir, el sistema multilateral de comercio que siguen todas las aduanas; sin embargo, cumplir con las RRNA ayuda en demasía a proteger la economía del país, resolver las preocupaciones relacionadas a políticas públicas a nivel nacional e internacional.
Políticas que van desde técnicas y regulaciones sanitarias, ambientales o causas comunes como la preservación de los animales, vegetales y plantas, así como la correcta aplicación de normas de seguridad en diferentes alimentos.
En resumen, el cumplimiento de la clasificación arancelaria es un paso, el primero de todos para que tus operaciones sean eficientes y éstas, a su vez, ayuden a otras causas externas.
Es por eso que en Grupo Ei ayudamos a nuestros clientes a cumplir de manera correcta en el cumplimiento de su clasificación arancelaria sin importar la complejidad de sus operaciones. Te invitamos a consultar nuestros servicios de consultoría en comercio exterior, y a seguir leyendo: